El niño y su vínculo con la familia y la escuela.

Dos factores esenciales en la vida de un niño.
Yasna Ojeda Novoa


Introducción.

El principal objetivo de esta monografía es de identificar en cuanto le afecta al niño la falta o desunión de uno de estos factores, sobre todo en estos tiempos en los cuales ha habido muchos cambios sociales que se ven reflejado principalmente en el hogar.
Por tal motivo los niños buscan apoyo o la necesidad de ser escuchados en otros lugares o con otras personas que casi siempre son sus mismos pares o por lo general aprenden de los medios de comunicación.
Estudios recientes indican que cuando la familia participa en las actividades escolares y se involucra con la tarea escolar de su hijo, éste tendrá más oportunidades de sobresalir académicamente. Sea usted un miembro de la familia, un compañero de estudio o un tutor, al trabajar con el niño para apoyarle en la tarea escolar, puede usted tener un impacto muy positivo en la vida escolar del niño.[1]

Palabras claves: Familia, escuela, relación entre familia y escuela, socialización, agentes de socialización.


Abstract.

The principal aim of this monograph is of identifying in all that it affects to the child the lack or disunity of one of these factors, especially in these times in which there have been many social changes that meet reflected principally in the home. For such a motive the children look for support or the need to be listened in other places or with other persons who almost always are the same couples or in general they learn of the mass media.
Recent studies indicate that when the family takes part in the school activities and it involves with the school task of his son, this one will have more opportunities to stand out academic. You are a member of the family, a companion of study or a tutor, on having worked with the child him to rest on the school task, you can have a very positive impact in the school life of the child.

Keywords: Family, school, relation between family and school, socialization, agents of socialization.


Cuando hablamos de familia, esto quiere decir un grupo básico del ser humano, tienen lugar los aspectos más importantes de la socialización, particularmente la primaria, tales como la afectividad y el proceso de identificación.
La familia es una institución de formas variables según la cultura, las épocas y contextos sociales.
La clase social de la familia en la que nace un individuo afectan profundamente a los modelos de socialización.
Este grupo básico, con el tiempo ha cambiado no por voluntad sino que por necesidad, esto ha sido causa de la modernización y el desarrollo del mercado y del Estado que priven de funciones a la familia.
Por tal motivo la familia pierde la función económica, ya que hay una separación entre el trabajo y el hogar por el surgimiento de las fábricas; la perdida de la importancia del patrimonio familiar por la socialización; el proceso de movilidad social y también la movilidad geográfica; el traspaso de las funciones de la familia a instituciones formales o sea la socialización para a la escuela o los medios de comunicación.
Por lo tanto la familia actualmente ha roto con redes de parentesco y es una unidad minima de consumo, ya no de producción, orientada a la crianza de los niños y cada vez menos de socialización.
La crisis de la familia tiene al menos un siglo de antigüedad y tiene mucho que ver con el desarrollo del modo de producción capitalista (Estado de bienestar), mas que con una crisis ética. Que ha derivado en una importante perdida de funciones de familia. Esto es debido a que el pilar fundamental de la familia, la madre, se proyecta su vida en parámetros de igualdad con el varón y también sobre lo profesional, esto más bien comenzó por necesidad como dije anteriormente.
Gracias a esto la familia deja de ser extensa o sea basada en la convivencia de un elevado numero de hermanos, hijos mayores e incluso abuelos y se trasforma en la que llamamos nuclear, constituida por los padres, con uno o dos hijos a lo máximo, y alejada, incluso espacialmente, de la influencia de otros núcleos familiares. La reducción de la convivencia generacional, las relaciones más permisivas entre padres e hijos o la incorporación de la madre al trabajo, son algunos de los aspectos que caracterizan hoy a esta familia “reducida”.[2]
Del trabajo extradoméstico de la mujer, lo que le permite alcanzar cierta independencia y un aumento de los ingresos familiares.
Las mujeres que cursan estudios superiores no tienden a crear un hogar familiar, o bien, si lo crean, no renuncian a su dedicación profesional. Las mujeres con un elevado nivel de formación tienden a combinar la maternidad y el trabajo remunerado.
Las mujeres casadas son trabajadoras muy flexibles, ya que en muchas ocasiones se ven obligadas a aceptar horarios de media jornada o, en el caso de que sea de jornada completa, sus empleos, por lo general, son de inferior categoría que el de sus esposos. A ello se debe añadir el esfuerzo suplementario que conlleva la realización de las tareas del hogar que, al no estar remuneradas, no se consideran como trabajo y por ello se califican como “especificas de las mujer”.
Por lo general los hombres se involucran menos en las ocupaciones del hogar y en el cuidado de los hijos.
La incorporación de la mujer al mercado de trabajo, el descenso de la fertilidad, las nuevas relaciones familiares, están provocando la aparición de nuevos modelos “modernizados” de familia, de modo que hoy podemos encontrarnos con:
· Reconstituidas: personas que se vuelven a casar. Conviven hijos de cónyuges de matrimonios anteriores.
· Monoparentales: familias de un solo progenitor. Frecuentemente mujeres con hijos.
· Cohabitación: formación de un hogar de una pareja no casada.
· Parejas de gays/ lesbianas
· Vivir solo.

Todas estas causas o consecuencias se extienden también al ámbito educativo, del que planteare a continuación.
Partiré mencionando que una de las funciones del sistema educativo es la de trasmitir la cultura a las nuevas generaciones y así posibilitar la formación de identidad a sus individuos.
La obligatoriedad escolar ha aumentado hasta los dieciséis años, sobrepasa. Por tanto, la niñez, afecta a toda la adolescencia y también a una parte de la juventud, esto sin contar con la masiva escolarización que ya se observa en la etapa infantil y en la postobligatoria. [3]
Para todas las familias la educación de sus hijos continúa ocupando un lugar de primer orden entre sus objetivos y prioridades. La familia sigue todavía proporcionando protección, cuidado y pautas de comportamiento a los miembros más pequeños, en un clima de actuación integral en el que se desarrollaran las curiosidades, disposiciones y capacidades, que posteriormente tendrán como estudiantes en el medio escolar y, mas tarde aun, en su desenvolvimiento como adulto.
A una cierta edad, es una responsabilidad compartida entre la familia y la escuela que el niño se desarrolle como persona y desarrolle sus conocimientos adecuadamente.
La conveniencia de la relación escuela-familia para potenciar las influencias educativas es reconocida y aceptada en el plano teórico. Las dificultades estriban en la materialización de la colaboración entre estas instituciones. Los padres en ocasiones trasladan la responsabilidad educativa a la escuela, al considerar la escuela como una institución de guarda y custodia.[4]
Tradicionalmente la relación escuela –familia se ha concretado al rendimiento escolar de los niños. Los padres y las madres se mostraban interesados por conocer la calidad del profesor, las características de la escuela y los maestros convocaban a los padres cuando los resultados docentes no se correspondían con lo esperado.
La familia y la escuela comparten un objetivo común; la formación integral y armónica del niño a lo largo de las distintos períodos del desarrollo humano y del proceso educativo, estas dos agencias de socialización aportarán los referentes que les permitan integrarse en la sociedad. Indiscutiblemente, estos sistemas de influencias necesitan converger para garantizar la estabilidad y el equilibrio para una formación adecuada de niños y adolescentes.
Los principales contextos educativos: familia y escuela tienen semejanzas y divergencias entre unos y otros;
· Objetivos educativos diferentes.
· Responsabilidades distintas.
· Tipo de actividades en cada entorno.
· Las relaciones que se establecen entre padres y educadores.
Si hoy reconocemos el papel decisivo de la escuela y la familia en la educación de los niños, este hecho no se ha comportado de la misma manera a lo largo de la historia. Una mirada retrospectiva nos muestra a la familia como primer y única institución encargada de la formación de las generaciones más jóvenes. La familia asumía la satisfacción de las necesidades infantiles, materiales y espirituales, así como la formación de valores y habilidades para la inserción a la vida adulta. Otros contextos laborales (taller, granja o tienda) posibilitaban el desarrollo de habilidades de aquellos niños que acudían a estos ámbitos.[5]
El contacto de la escuela-familia ha transitado por diferentes facetas. En otros momentos los padres han abogado por la exclusividad en cuanto a la formación de la personalidad de los hijos y los maestros aceptaban su influencia en el plano de la instrucción. En la actualidad identificamos a padres que depositan en los maestros mayor responsabilidad en la formación de los pequeños y maestros reclaman mayor participación de los padres en la preparación de sus hijos para la vida.
La dificultad conceptual para propiciar la interacción familia-escuela no radica en la sensibilización de estas instituciones sino en el planteamiento de qué entiende cada una de las partes por participación en el encuentro interactivo y como hacerlo.
A este complejo asunto se le añade variables tales como el nivel académico de los padres aunque los resultados de investigaciones no apuntan a una relación directa, es decir que padres con un nivel de escolarización bajo pueden mostrar interés y colaborar con la educación escolar de sus hijos y cooperar en las actividades o manifestar poca implicación en los temas escolares de los hijos depositando toda la responsabilidad en los maestros. Lo mismo ocurre con padres con un nivel superior de enseñanza. Tampoco el nivel socio-económico de estos correlaciona directamente con su integración en las actividades educativas de la escuela.
La familia es el primer espacio de socialización de los niños y es a su vez, el nexo de unión entre las diferentes instituciones educativas en la que participa, incluyendo la más importante de ellas: la escuela.
Esta relación matricéntrica de la familia se expresa en:
· ámbito de referencia obligada (se puede cambiar de escuela o de otra institución educativa no formal pero no de familia)
· ámbito de toma de decisiones sobre la inserción en otras instituciones educativas, incluida la escuela.
· ámbito que interviene informalmente o formal representando a los niños en la escuela y otras instancia educativa.
· ámbito mediador de conflictos entre los niños y las instituciones educativas.
· ámbito de proyección de las experiencias vividas en otros entornos.
Esta posición privilegiada de la familia en la formación de sus hijos la puede ocupar también por los puntos de contactos y las semejanzas con las instituciones educativas, en particular con la institución escolar.
Las semejanzas entre ambos contextos educativos pueden resumirse en:
· Pertenencia a una misma cultura.
· Comparten objetivos generales en término de un código moral, normas de conductas y capacidades deseables.
· Coinciden en la misión educativa de promover el desarrollo integral de niños y niñas.
· Asumen la función de cuidar y proteger a la joven generación.
La escuela es una organización laboral que se caracteriza por su carácter organizativo burocrático, sus normas, un sistema de roles desempeñados por profesores y alumnos que se diferencian de las relaciones interpersonales del espacio familiar.
Del Río y Álvarez ha estudiado las divergencias existentes entre la familia y la escuela en cuanto a los patrones de comportamiento, reglas de interacción, métodos de comunicación y procedimientos de transmisión de información. (Del Río y Álvarez, 1972)
Resumire algunos aspectos relevantes en la comparación entre familia y escuela

Sistemas de Actividades:
· Familia: El niño intervienen en actividades de la vida cotidiana. Regularmente responden a sus intereses y se muestran más motivados.
· Escuela: Las actividades son diseñadas y planificadas en función de los objetivos educativos. Tienen un carácter simbólico, fragmentadas y no integradora entre sí ni del conocimiento académico y de la realidad. Aparecen distantes de las necesidades e intereses actuales del niño y frecuentemente son menos gratificantes.

Sistemas de Relaciones:
· Familia: La relación diádica con el adulto es más estable y duradera. Los padres responden de manera inmediata a la demanda de los niños. Además de ser más controladores y propician más regaños frente a conductas exploratorias de los niños.
· Escuela: La interacción de los maestros con cada alumno es numéricamente menos aunque favorece el aprendizaje social y las normas de convivencia de grupo. Los niños suelen manifestarse con mayor independencia y requerir menos nivel de ayuda instrumental que la familia.

Comunicación y Aprendizaje:
· Familia: El aprendizaje se produce por observación e imitación del comportamiento del adulto, además de la demostración que no se apoya en reglas, principios y generalizaciones del conocimiento sistematizado científico.
·Escuela: El aprendizaje por intercambio verbal. La comunicación verbal amplia el vocabulario del niño, la estructura del discurso difiere del lenguaje empleado en la familia.

Unidad de lo cognitivo y lo afectivo:
· Familia: Las interacciones y los aprendizajes poseen una carga afectiva. Los contenidos aprendidos se identifican con las personas que propiciaran el mismo: los padres. La posición del niño en el grupo familiar no depende del éxito o el fracaso en la escuela e incluso brinda apoyo emocional en situaciones de fracaso en cualquier contesto.
Escuela: Los aspectos intelectuales o afectivos no siempre se funden, ni la enseñanza se personaliza. El componente afectivo no se enfatiza como el cognitivo.


Concepciones sobre la educación y el desarrollo:
· Familia: Los padres suelen sostener valores más tradicionales en cuanto a la significación de la obediencia, la disciplina estricta y el rendimiento académico. (Oliva y Palacios 1997).
· Escuela: Los maestros constituyen un personal especializado, calificado en educación.

Mantienen actualizada su formación teórica y experimentan cambios en sus valores y creencias acerca de estos temas. Acumulan una rica experiencia a través de la interacción con niños diferentes. El desempeño de los roles de maestro y padres configuran una percepción sobre la educación y el desarrollo e influye en la interacción con los hijos/alumnos.
Estos elementos diferenciadores entre familia y escuela impactan a su vez en la relación entre ambos [6]
El contraste entre la familia y la escuela estimula el desarrollo integral del niño porque recibe influencias de estos contextos educativos diferentes. No obstante, el equilibrio se rompería si los desencuentros fueran significativos entre los ámbitos familiar y escolar. La falta de coherencia entre los valores propugnados por uno y otro, las experiencias vividas en cada escenario, las formas de interacción y conductas reforzadas en la escuela y la familia, todo ello conduciría a conductas de inadaptación social y dañarían su desarrollo.
Además de la magnitud de la discrepancia entre la familia y la escuela pueden influir positiva o negativamente en el proceso de aprendizaje y de socialización del niño otras variables tales como:
El período de desarrollo evolutivo del niño
En edades más tempranas del desarrollo se espera que el niño sea más dependiente y sensible de las discrepancias entre las prácticas educativas familiares y los efectos pueden ser más negativos.

Conclusión.
Es esencial que la familia y la escuela estén en pleno contacto y comunicación por el buen bienestar del niño, que eso es lo que importa.
Como pudimos apreciar el único perjudicado es el si no le tomamos la importancia al tema.
La relación familia-escuela se produce por la participación de las madres y padres en contactos de tipo informal entre los que se encuentran el acompañamiento de los hijos a la escuela el que disminuye en la medida que crecen los niños y se trasladan solos hacia la escuela.
Las entrevistas y llamadas telefónicas entre padres y profesores asi como, la participación de los primeros en actividades extradocentes son contactos poco frecuentes e irregulares pero propician estos encuentros.
Estos contactos esporádicos no siempre indican de falta de interés de los padres, puede ser que los maestros no dominen suficientes vías para articular esa colaboración.
La colaboración de los padres no supone la pérdida de autonomía como padres, ni identificarse con la intención de cambiar su comportamiento con el hijo. También los maestros abogan por esa autonomía para ellos mismo , ambos pueden aprender uno de los otros a compartir sus experiencias sin perder espacio ni autoridad.
Las madres y los padres necesitan sentirse seguros en el desempeño de la maternidad y paternidad. La asunción de estos roles se ejercen desde las experiencias vividas y observadas en otras familias y lo legado por la cultura científica .Todo ello representa lo mejor que saben y lo más que pueden hacer como padres. En la práctica para lograr la colaboración de los padres no conviene despertar las resistencias, erigir o levantar barreras comunicativas ni que se formen una percepción de que se les enjuicia, ataca o agrede.

Libros:

Juan C. Agulla (1973) Educación, sociedad y cambio social.
Editorial KAPELUSZ

Frederick Elkin (1981) El niño y la sociedad. Buenos Aires.
Editorial PAIDOS

Antonio Guerrero Serón (2003) Enseñanza y Sociedad. El conocimiento sociológico de la educación.
Editorial SIGLO VEINTIUNO

Revistas especializadas:

Antonio Luzón y Julián Luengo, La familia en el epicentro de una nueva infancia. Trasformaciones actuales e implicaciones mutuas. 179-200

Sitios Web:

Vínculo entre la escuela y el hogar
http://www.ed.gov/pubs/vinculo/kit_word.html 30.06.09


Escuela-familia: Encuentro y desencuentro
http://www.monografias.com/trabajos23/familia-escuela/familia-escuela.shtm 30.06.09


alianza efectiva familia-escuela: un programa audiovisual para padres
http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0718-22282005000200012&script=sci_arttext 30.06.09

[1] Fuente: http://www.ed.gov/pubs/vinculo/kit_word.html (30.06.09)
[2] Antonio Luzón y Julián Luengo. La familia en el epicentro de una nueva infancia. Trasformaciones actuales e implicaciones mutuas.
[3] Antonio Luzón y Julián Luengo. La familia en el epicentro de una nueva infancia. Trasformaciones actuales e implicaciones mutuas.
[4] Fuente: http://www.monografias.com/trabajos23/familia-escuela/familia-escuela.shtml (30.06.09)
[5] Fuente: http://www.monografias.com/trabajos23/familia-escuela/familia-escuela.shtml (30.06.09)
[6] Fuente: http://www.monografias.com/trabajos23/familia-escuela/familia-escuela.shtml (30.06.09)